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Anales de SAIPA - Sociedad Argentina para la Investigación de Productos Aromáticos
V JORNADAS NACIONALES DE ACTUALIZACIÓN SOBRE RECURSOS NATURALES AROMÁTICOS Y MEDICINALES - San Carlos de Bariloche (Río Negro), Argentina - 1991
Volumen XII - 1994 - pág 27 a 34NUEVOS ACEITES ESENCIALES
Esteban N. Veghazi ** Casilla 1063, Santiago, Chile.
INTRODUCCIÓN
Los aceites esenciales son los principios aromáticos que dan olor característico a plantas, flores y árboles. Son mezclas muy complejas de diferentes productos químicos (acetonas, terpenos, aldehidos, alcoholes, etc.) que se encuentran en las hojas, flores, tallos o raíces según sea el caso.
Se conocen más de mil aceites esenciales, pero sólo alrededor de cien se usan comercialmente, por lo tanto, es importante conocer nuevas plantas e introducir sus aceites esenciales en las diferentes ramas de la industria.
USO DE LOS ACEITES ESENCIALES
Industria Alimentaria
- Para condimentar carnes preparadas, embutidos, sopas, helados, quesos, etc. Aquí se pueden mencionar los aceites esenciales de coriandro, naranja, mentas, etc.
- Para preparar bebidas alcohólicas y no alcohólicas, especialmente refrescos; se pueden citar las esencias extraídas del naranjo, limón, mentas, hinojos, etc.
- Se usan esencias también en caramelos, chocolates y chicles.
Industria Farmacéutica
- Se usan en cremas dentales (aceites de mentas e hinojo), analgésicos e inhalantes para descongestionar las vías respiratorias (eucalipto), etc.
- Como neutralizante del sabor desagradable de muchos medicamentos (naranja, mentas, etc.).
Industria de Cosméticos
Esta industria es uno de los grandes usuarios de aceites esenciales para la producción de cosméticos, jabones, colonias, perfumes, maquillaje en general. En este rubro se pueden citar los aceites de geranio, lavanda, vetiver, rosa, mentas, patchouli, lavandina, etc.
Industria de productos de uso veterinario
Un caso típico de este tipo, de industria es el uso del aceite esencial de paico muy apetecido por su contenido de ascaridol, peróxido orgánico vermífugo.
Materias Primas
Algunos aceites esenciales se usan como materia prima para síntesis industriales (linalol, alfa y beta-ionona, safrol, vitamina A, etc.).
Desodorantes industriales
Últimamente se está desarrollando fuertemente el uso de esencias para disimular el olor desagradable de algunos productos industriales: caucho, plásticos, pinturas, etc.
Este consumo es relativamente nuevo y sus posibilidades son valiosísimas.
Industria del tabaco
El 35% de la producción de mentas en los Estados Unidos está utilizado en la fabricación de cigarrillos.
Por la diversidad de su empleo se puede afirmar que los aceites esenciales no son productos de lujo, sino elementos imprescindibles en la civilización actual.
Durante los últimos años la industria aromática en escala mundial ha logrado remarcables resultados y ha señalado un crecimiento incesante en su desarrollo, debidos ambos aspectos a algunos factores objetivos, de índole social, económica y científico-técnica, vinculados al aseguramiento de una vida normal y completa para el hombre.
Dichos factores son:
- Mejoramiento de la cultura del hombre.
- Mejoramiento de las condiciones y el nivel de vida del hombre, cuyas necesidades están en constante crecimiento.
- Aumento de la población.
- Formación de nuevos grupos consumidores en la población de los distintos países del mundo.
En los años 40 de nuestro siglo los productos de la industria aromática encontraban aplicación nada más que en un campo de la perfumería y la cosmética. Hoy su utilización ha superado éstos marcos tan estrechos y ellos se han adentrado muy ampliamente en muchos más campos de la industria y sobre todo en lo relacionado con la vida cotidiana del hombre.
Una vasta aplicación a escala mundial encuentran los medios aromáticos que se utilizan actualmente en grandes cantidades también para la aromatización de los productos de la industria alimenticia, jabonera, tabacalera, farmacéutica, de plásticos, cauchos y otras ramas vinculadas con la vida diaria, la cultura, el gusto y la higiene del hombre.
Se han introducido también la aromatización de los detergentes, insecticidas, desodorantes, preparados para repeler insectos, perfumes para aromatizar el ambiente, etc. Se realizan experimentos con el fin de lograr una aromatización duradera de los géneros y evitar de esta manera los olores desagradables.
Se supone que en el futuro la aplicación de los productos aromáticos se ampliará aún más y se buscarán también, nuevas variedades, para introducirlos en nuevas ramas de la industria general.
La industria aromática es altamente eficiente y tiene plazos cortos de retorno de las inversiones de capital. Por dicha razón esta rama ha logrado el desarrollo más intenso precisamente en los países adelantados y goza de buen renombre entre las más importantes industrias.
Otra particularidad de esta industria que la distingue de las demás y que determina su rápido desarrollo estriba en su orientación directa a las necesidades del consumidor corriente.
Los Productos de la Industria Aromática incluyen:
- Bases y composiciones para los fines de la perfumería y la cosmética, para la preparación de perfumes, aguas de colonia, aguas de tocador, etc.
- Medios de aromatización para varias industrias que se dedican a la fabricación de productos vinculados a la vida cotidiana del hombre.
Para esto se utilizan:
- Productos aromáticos naturales
- Sustancias aromáticas sintéticas
Los productos aromáticos naturales y las sustancias sintéticas representan las materias primas principales para la preparación de bases, composiciones y medios de aromatización.
Un rasgo típico de los productos aromáticos naturales y sintéticos es que tienen olor (aroma). A juicio de los científicos pueden denominarse sustancias aromáticas "aquellas sustancias que tienen aroma y que, en temperatura normal, se perciba, con intensidad suficiente por los órganos del olfato provocando una sensación agradable".
Según otros son "una sustancia que en temperatura normal se caracteriza con determinada intensidad del aroma y puede ser considerada como aromática si sola o en combinación con otras sustancias aromáticas, tiene un aroma agradable en base al cual puede encontrar su aplicación". De las definiciones señaladas anteriormente queda claro que el aroma representa el elemento fundamental para determinar la calidad de los productos aromáticos. Así que, por esta razón, si un aceite esencial o sustancia aromática, químicamente sintetizada está aplicada en perfumería, la característica principal y determinante para su utilidad será su aroma. Su evaluación será la que determine la cuestión en cuanto a las posibilidades y la orientación de la utilidad, ulterior del producto. En la actualidad esta característica todavía se determina ante todo subjetivamente. Para los productos aromáticos destinados a la industria alimenticia, junto con el aroma, otro rasgo típico es también el sabor.
Dicha particularidad de los productos aromáticos determina también el carácter de la tecnología de su producción. La tecnología de los productos aromáticos naturales es relativamente sencilla, pero por su carácter se distingue en gran medida de las demás industrias. Esta tecnología pertenece al grupo de la tecnología química que se determina "fina". La materia prima debe ser escogida y elaborada para que de ella se obtenga totalmente todo lo que exhala el aroma, que no se modifique y que se conserve bien.
Una gran parte de los productos aromáticos naturales se caracteriza por sus propiedades antisépticas. Desarrollan también en el organismo una considerable acción fisiológica de modo que cada olor actúa de una manera determinada. Ellos influyen sobre la capacidad de trabajo, el ánimo, la vista, el oído, la temperatura de la piel, la presión arterial, el ritmo de la respiración, el pulso, etc.
Debido a estas calidades actualmente se efectúan numerosos ensayos concernientes a la introducción de los productos aromáticos también en la medicina. Ya se menciona la creación de la llamada "aromaterapia". Durante largo tiempo, a través de los siglos, los productos aromáticos utilizados inicialmente en forma de aceites, bálsamos, ungüentos, y polvos, más tarde como composiciones, bases y medios de aromatización, han sido obtenido solamente de los productos aromáticos naturales. Pero ya en el siglo pasado ha sido establecido que la producción mundial de los productos aromáticos naturales no podría satisfacer las necesidades de la perfumería y de las demás industrias que fabrican productos aromatizados. En relación con lo anteriormente expuesto cabe destacar que la fabricación de los productos naturales tiene algunos inconvenientes, por ejemplo la temporalidad de la producción, dependencia de las condiciones meteorológicas y como consecuencia de los cuales la cosecha será buena o mala, necesidades de terreno y mano de obra que también resultan imprescindibles para otros cultivos y están vinculados, ante todo, con la aumentación de la población. Económicamente esto tiene su repercusión sobre los precios que varían en unos límites relativamente estables.
En base a las premisas citadas anteriormente, la perfumería se ha orientado hacia las sustancias aromáticas sintéticas con el fin de cumplir con sus objetivos y desarrollo. Estas últimas se obtienen de materias primas naturales y sobre todo químicas que resultan baratas y muy dispensadas debido a lo cual sus precios son bajos. Como su producción y las cantidades no están en dependencia de las condiciones climatológicas y naturales, sus precios también se mantienen fijos.
Sin embargo, las sustancias aromáticas sintéticas no están en condiciones de sustituir a los productos naturales, ya que no pueden producir el efecto que ofrecen los otros. Los productos aromáticos naturales garantizan, por su calidad y las composiciones de los perfumes y los medios de aromatización "bouquet", duración y densidad que resultan exclusivamente importantes para los perfumes de alta calidad.
Mediante la comparación llevada a cabo entre las sustancias naturales y las sintéticas, llegamos a la conclusión de que todo lo que nos ofrece la naturaleza, no puede ofrecernos la química.
Este planteamiento está reafirmado por el desarrollo que los productos aromáticos naturales y las sustancias aromáticas sintéticas han alcanzado en los últimos años y señala que tanto la producción de los naturales, la de los sintéticos se encuentran en incremento constante. Cabe mencionar que desde los años 80 hay vuelco sostenido hacia lo natural, especialmente en la industria alimenticia, farmacéutica y hasta cierto punto también en la cosmética.
Hace dos años o más, cuando todavía era yo el vicepresidente ejecutivo de ACHIPEMAC, por intermedio de la Embajada de Francia me visitó una delegación comercial de Francia, quienes vinieron a buscar diferentes materias primas de importación desde Chile, entre ellas aceites esenciales. Yo les mencioné algunos, como por ejemplo manzanilla, menta, lavanda, eucalipto, boldo, orégano, etc. Uno de los ingenieros presentes me dijo textualmente: "No entiendo por qué ofrecen ustedes, y no sólo en Chile, sino también en los otros países que hemos visitado, aceites esenciales que nosotros podemos comprar en Europa o en algunos países del Cercano Oriente a mejores precios y con mejores condiciones; ¿Por qué no ofrecen aceites esenciales autóctonos, obtenidos de plantas silvestres autóctonas?; sabemos que América Latina es muy rica en plantas aromáticas silvestres. Nosotros estamos dispuestos a probarlos en nuestras industrias y si son aceptables, gustosamente los compramos. Es un proceso un poco lento; pero si los encontramos buenos, ustedes podrán tener la seguridad que los compraremos durante largo tiempo".
Parece que nosotros, los chilenos no les hemos prestado bastante atención y prácticamente no pasó nada para descubrir nuevas plantas oloríferas en Chile, aunque hay muchas variedades para extraer sus aceites y ofrecerlos. Según mis conocimientos en otros países de América Latina tampoco pasó mucho al respecto. Pero algunos países europeos lo han percibido y las listas de aceites esenciales usados en Europa muestran una ampliación bastante grande, incluyendo aceites esenciales de plantas silvestres locales y las cantidades en el comercio hacen suponer que han realizado pasos positivos hacia su domesticación y cultivo.
Por intermedio de encuestas realizadas en algunas embajadas y agencias comerciales se pudo preparar la siguiente lista de nuevos productos, que seguramente no es completa:
NUEVOS ACEITES ESENCIALES
Acorus calamus
Achilea milllefolium
Antriscus cerefolium
Apium graveolens
Arctium lappa (Oí. Bardanae)
Armoraceae lapathifoliae/rusticana
Árnica montana
Arthemisia absynthium
Arthemisia vulgaris
Asarum europeum
Betula péndula
Coriandrum sativum
Chrysanthemum parthenium
Daucus carota
Glechoma hederaceae
ínula helenium
Iris germánica
Junniperus communis
Lippia citriodora
Malva silvestris
Marubium vulgare
Melisa oficinalis
Mentha crispa
Nepeta cataria
Ocimum basilicum
Pastinaceae sativae
Petersilium crespum
Pimpinella saxífraga
Pinus silvestre
Populus nigra
Robinia pseudoacacia
Rosmarimus officinalis
Salvia sclarea
Solidago virgaaurea
Tanasetum vulgare
Teucrium chamaedrys
Thymus serpillium
Tilia spp.
Verbena officinalis
Viola adorata
Viola tricolor
Cálamo verdadero
Milenrama
Perifollo, cerafolio
Apio
Bardana
Rábano picante
Árnica
Ajenjo
Artemisa
Asaro
Abedul
Cilantro
Matricaria
Zanahoria
Yerba terrestre
Yerba de moro (helenio)
Iris
Enebro
Cedrón
Malva silvestre
Marubio blanco
Melisa
Hierbabuena morisca
Hierba gatera
Albahaca
Chirivia
Perejil crespo
Pimpinella blanca
Pino albar
Álamo negro
Falsa acacia
Romero
Salvia romana
Vara de oro
Yerba de San Marco/tanaceto
Camedrio
Serpol
Tilo
Verbena
Violeta
PensamientoEn Chile, Argentina, Bolivia, Paraguay, Perú y seguramente también en otros países existen varias especies interesantes, que se podrían explotar, en principio como silvestres y luego se podría cultivarlas. Las plantas aromáticas silvestres constituyen un rubro poco estudiado y aún menos explotado en estos países y en los otros de América Latina, a pesar de que existen muchísimas en sus zonas fitogeográficas. Mientras se desarrollan las primeras averiguaciones de la existencia real de estas plantas, podrían ser preparadas y definidas las primeras muestras; se podría empezar a crear la posibilidad de colocación en el mercado local y también de exportación, luego se decidiría su elaboración industrial a base de la cantidad que se encuentra en forma silvestre o en el caso si se justifica, empezar su cultivo.
Cabe subrayar que fuera de las averiguaciones comerciales es necesaria la investigación científica apoyada por instituciones estatales y/o particulares no sólo en el campo químico, sino también en el botánico para la correcta clasificación de las especies y variedades y en el campo de la agronomía para determinar las mejores condiciones del cultivo, con vistas a un buen rendimiento que permitirá la explotación industrial. Para evitar la repetición de ciertas investigaciones y trabajos sería conveniente formar un grupo internacional e interdisciplinario, pues la flora silvestre de nuestros países es bastante similar.
No olvidemos que la competencia entre los fabricantes de aquellos productos donde se utilizan aceites esenciales, es muy grande y cada uno quiere producir alguno nuevo, así la aceptación de nuevos aceites esenciales es muy probable y promisoria.
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